Con estudios en Economía, Psicología, Mercados Financieros, Gonzalo Germán es Coach experto en Psicotrading, Formador de Tráders, Gestor de la web www.diezmilhorasdetrading.es, escribe y colabora con varias páginas económicas como Rankia é Investing.
Reflexionando siempre sobre la vida y sobre el trading, tratando de ofrecer una visión diferente y lo más “humana” posible sobre el mundo del trading y las inversiones.
A continuación la entrevista a Gonzalo Germán:
Entrevistador: ¿Cómo fue tu primera experiencia en los mercados bursátiles?
Gonzalo Germán: Comencé comprando acciones al contado, de valores de la Bolsa española de pequeña capitalización, y realmente sin tener ningún tipo de formación ni de criterio, simplemente por recomendaciones de terceras personas, por rumores, porque me gustaba un sector en concreto, ó incluso porque cotizaban a un precio muy bajo y podía comprar más número de acciones, y en teoría, ganaría más.
Así de “lógicas” y estudiadas fueron mis primeras operaciones en el mercado, pero como estábamos en el inicio de una larga y sostenida tendencia alcista en las Bolsas, prácticamente cualquier acción que compraba experimentaba unas enormes revalorizaciones en muy pocas fechas, con lo que tuve la “mala suerte” de empezar ganando mucho, bastante más de lo que podía haber imaginado.
Entrevistador: ¿Qué ocurrió después y cómo fue tu evolución como operador?
Gonzalo Germán: Aunque suene a tópico, y suela repetirlo con frecuencia, en la vida y en el trading, no es posible confiar siempre en la suerte (mejor hacerlo en el conocimiento y en el esfuerzo), y al final, el mercado te acaba poniendo en tu sitio.
Cuando finalizó dicho ciclo alcista, con la misma rapidez con la que subió el valor de mi cartera, ésta cayó bruscamente y sin compasión, y por supuesto, en vez de aceptar la pérdida y cerrar las operaciones, lo que hacía era “promediar”: comprar de nuevo más lotes de acciones para “compensar” las bajadas del precio, y cruzando los dedos para que el precio se diera la vuelta y volviera a mi precio de entrada.
Quien tenga cierta edad aún recordará la burbuja tecnológica y la falsa é inflada revalorización que experimentaron infinidad de valores y cómo dejaron atrapadas a muchas personas que seguían comprando y comprando mientras las cotizaciones se hundían...y lamentablemente, tampoco volvieron a “recuperarse” las acciones que poseía (ya se sabe que en la Bolsa, hasta que no se materializa la orden de venta, nadie es aún realmente dueño de sus plusvalías...), y lo que el mercado me dio, me lo arrebató de golpe y con toda la justicia del mundo.
Entrevistador: ¿Cómo saliste de esa situación y por qué seguiste haciendo trading?
Gonzalo Germán: Evidentemente, después de pasar por una circunstancia así, solamente te quedan dos opciones: ó tirar la toalla y abandonar, ó reconocer el error y obligarse a hacer las cosas de otra manera.
Asumí que me faltaba absolutamente todo: conocimiento, experiencia, sistema, reconocí que había cometido todos los errores del mundo (falta de formación, no poner stops, no asumir pérdidas, promediar, no dejar correr nunca los beneficios, asumir mucho más riesgo del que podía permitirme, operar en mercados sobre los que no tenía información ni datos, basarme en rumores...), pero esa cura de humildad me sirvió para intentar hacer las cosas de otra manera, para obligarme a aprender y para entender que existía un camino, pero que yo estaba en el lado equivocado y aún casi ni sabía andar.
Entrevistador: ¿Y cuál fue tu evolución como trader desde ese momento?
Gonzalo Germán: Pues siguiendo hablando de pasos, después no dí precisamente los más acertados, me obligué a empezar a aprender, pero como hace unos cuantos años no existía tanta oferta formativa, me fíe y confié demasiado en determinadas personas y acabé realizando un curso tras otro (a cuál más increíblemente caro y sin utilidad ni aplicación posterior alguna), que prácticamente no me aportaban nada, sino al contrario, contribuían a quitarme la moral...y gran parte de la cuenta.
Ya había descubierto la infinidad de posibilidades que podía ofrecer el trading, la cantidad de instrumentos, mercados, técnicas y modos de operar posible...el continuo reclamo de la libertad financiera y de la consistencia que tanto ansiaba alcanzar, pero no sabía ni cómo ni cuándo iba a poder alcanzarla y llegué a pensar que igual esto no estaba hecho para mí.
Me sentía atrapado: estaba a veces hasta 12 y 14 horas frente a los gráficos, me leí todos los libros que sobre el tema caían en mis manos, estudié todas las técnicas que aplicaban los demás, probé centenares de indicadores, de estrategias, decenas de mercados...pero parecía que estaba siempre escalando una interminable montaña de hielo: todo lo que ascendía (ó lo que ganaba) durante unas cuantas sesiones, en un sólo error, descendía (y lo perdía) de golpe y en una continua montaña rusa.
Entrevistador: ¿Y cómo conseguiste salir de ese callejón sin salida?
Gonzalo Germán: Pues de nuevo, y recurriendo más que a tópicos a sentencias que acaban siendo ciertas, la única forma de salir de un presunto callejón sin salida es hacerlo por el mismo sitio por el que se ha entrado.
Si yo sólo me había metido en el mismo, buscando tanta complejidad, fijándome más en los demás que en mí, el único modo de conseguir llegar a la meta y a mi objetivo era simplificar, buscar lo sencillo, aprender de los que lo habían conseguido (tanto de sus errores como de sus aciertos), pero entender que hay tantos tipos de traders como de personas, que no tiene sentido buscar continuamente un sistema que sea eficaz al 100% (porque eso ni existe ni existirá) sino basta con tener uno en el que tengamos esperanza matemática positiva, con el que ganemos más veces que perdamos... (y que hay que olvidarse de buscar soluciones milagrosas y comenzar a entender que esa consistencia que tanto buscamos, igual está dentro de nosotros, no en los mercados.
Entrevistador: ¿Hasta qué punto es importante el sistema de trading a la hora de operar?
Gonzalo Germán: Es importante pero más vital aún es tener como mínimo un sistema de trading, el que sea, y ponerlo en práctica sin improvisar día a día en los mercados, aplicar siempre el mismo.
Yo creé el mío, apoyándome principalmente en la tendencia y en la acción del precio, en observar lo que éste hace, no lo que yo quiero que haga...teniendo que escoger de entre todo lo que había aprendido tras miles de horas frente a los gráficos lo que me servía para tener razón en el trading, al fin y al cabo, se debe estar para eso: para buscar tener resultados, no para tener razón.
Una de mis claves ha sido serle fiel, creer en él tanto como en mí, respetar lo que hagan, digan ó piensen el resto de los traders, pero atreverse a hacerlo un día sí y otro también.
Creo que realmente la mayoría de sistemas ó estrategias de trading que tengan cierta lógica y estén probadas y con suficiente “backtesting” detrás, funcionan, si se les deja “respirar” y que maduren el tiempo y las operaciones necesarias, y si los aplicamos con constancia y coherencia.
Después de probar muchos, volví al mío, porque funcionaba y funciona, siempre que yo también funcione, hay que asumir que el trading es una carrera de fondo, un maratón y no un sprint, y que aquí no tienen lugar las prisas ni la precipitación, y que habrá días buenos, malos y regulares (como en cualquier otro negocio ú ocupación del mundo) pero que ni nos tenemos que dejar invadir por el ego porque tengamos unas cuantas operaciones ó sesiones positivas, ni hundirnos a las primeras de cambio porque tengamos que soportar uno ó varios días en los que el precio no se mueva tanto y estén los mercados laterales.
Entrevistador: ¿Por qué insistes tanto en que el Psicotrading es la parte más importante de un sistema de trading?
Gonzalo Germán: En cualquier sistema de todo es importante, hay que intentar que todo sea un engranaje lo más ensamblado posible, que nos permita dudar lo menos posible cuando nos enfrentemos a nuestra operativa: la gestión monetaria, el análisis técnico, fundamental ó la acción del precio.
Pero todo eso, si no se combina con una adecuada gestión emocional, con una correcta disciplina que nos ayude a controlarnos, al final, no servirá para mucho porque lo importante no solamente son los conocimientos que se tengan, sino atreverse a hacer lo que hay que hacer con esos conocimientos que se tengan.
Sin una adecuada gestión mental, sin un adecuado control y dominio de las emociones, dejaremos que en nuestra operativa se cuelen “enemigos” tales como el miedo, el ego, la avaricia, la imprudencia, la frustración, la ira, el dolor...y es obligatorio enfrentarse al mercado lo más tranquilos posibles, sin esas nefastas compañías.
Tener la actitud (los conocimientos, la formación, la información) precisa, ocupándonos de aprender lo más posible y mejor posible, pero también la actitud (la voluntad, el deseo, el autocontrol, la gestión mental) adecuada.
Es la combinación de ambas lo que nos puede convertir en ganadores ó en perdedores y en mi caso, saber que dependía en mayor parte de mí, empezar a darle al Psicotrading y al control de las emociones la importancia que debía tener.
Incluirlo como una de las piezas más importantes de mi Plan de Trading, fue lo que me hizo cambiar y me llevó a la consistencia, aunque en los mercados, nunca nadie debe descuidarse y siempre hay que ser prudentes y nunca dejar de aprender, ni de aprendernos.
Entrevistador: ¿Crees que un buen trader nace ó se hace?
Gonzalo Germán: Sin duda, y después de mi experiencia personal como trader y como formador de traders, creo que se hace.
Que nadie es, a priori, mejor que nadie y que da casi igual el punto ó la condición social ó académica de la que se parta é importa mucho más tener claro hacia dónde se quiere llegar.
Pero es necesario entender que es un camino largo, que como me gusta repetir siempre, es difícil, pero no imposible, y que hay que darle tiempo al tiempo é igual que la mayoría de la gente que conozco que ha conseguido ser consistentes, es vital acumular experiencias, horas de operativa, de análisis, de estudio, de formación... Independientemente del tiempo que luego una persona dedique a lo que es la operativa pura y dura, debe haber un trabajo previo a la misma y otro posterior a ella.
Hay que obligarse a tener plan de trading trazado y diseñado para nosotros mismos (ó adaptar el de cualquier otra persona que lleve más tiempo que nosotros a nuestras circunstancias, nuestro tiempo, el tamaño de nuestra cuenta...), a llevar un diario de trading con el control económico (y emocional) de nuestras operaciones y no pretender triunfar de la noche a la mañana.
Entrevistador: ¿Entonces qué sugiere?
Gonzalo Germán: Ponerse objetivos pequeños, para luego ir a conseguir otros más grandes, pero estar focalizados lo más posible en lo que estamos haciendo y en lo que queremos llegar a ser y a hacer, y entender de nuevo que como en cualquier otro negocio, ocupación ó actividad, es preciso una inversión previa en formación, en adquisición de conocimientos, en tiempo, en dedicación y en compromiso.
La gente suele tener demasiada prisa y como hay exceso de información (y a veces, demasiado sesgada ó interesada) piensan que pueden empezar a ganar mucho dinero en muy poco tiempo.
Siempre digo que el conocimiento sobre cualquier sistema de trading, sobre la plataforma, sobre estrategias con un ratio más ó menos positivo de acierto...la teoría...es perfectamente posible aprenderla y asimilar en muy poco tiempo.
Pero para adquirir la habilidad y la seguridad precisa, para operar con la menor dosis de incertidumbre, son necesarias muchas muchas operaciones y muchas muchas horas frente a los gráficos, pero cada operación (independientemente del resultado que obtengamos) nos debe hacer más sabios... que ganemos ó que perdamos, pero que siempre, como mínimo, aprendamos.
Suelo utilizar el símil de que cualquier persona puede aprender a conducir y a poner en marcha un vehículo en muy poco tiempo, pero que le llevará kilómetros y horas convertirse en un conductor seguro, experto y solvente.
Entrevistador: ¿Qué consejos le darías a todo aquel que está pensando dedicarse al trading y a aquel que está pensando por contra abandonarlo?
Gonzalo Germán: Al que está pensando en abandonarlo le recomendaría que se detuviera a “afilar su hacha” y a analizar si está en la situación que está por haber hecho mal las cosas y cometer errores (yo ya he reconocido que en mis primeros años cometí todos los del mundo), y que si aún le quedan ganas y voluntad, cambie de plan, no de meta.
Que se dé otra oportunidad, pero si va a ser disciplinado y no se va a saltar ninguna regla.
Y al que comienza le diría que se acercara a este mundo tan apasionante con la mente abierta y limpia, sin prejuicios y sin ideas preconcebidas, sin olvidar nunca que el trading puede dártelo todo (si haces bien las cosas y sigues el camino correcto) pero quitártelo todo también (si cometes demasiados errores y no eres capaz de reconocerlos y corregirlos).
Que es obligatorio ir muy despacio y sin prisas; poco a poco, pero sin pararse, estar operando en demo el tiempo preciso, y luego empezar en real con contratos muy pequeños ó incluso con mini contratos ó micro contratos al principio, hasta “ganarse el derecho” a ir operando con más y más contratos (por eso también recomiendo empezar y operar con CFDs, porque permiten ese fraccionamiento de nuestras posiciones).
Les diría que es necesario formarse, aprender, estudiar un sistema de trading y hacerlo suyo, que aprovechen “el lado bueno” de las redes sociales, para empaparse y absorber las experiencias (buenas y malas) de otros tráders que ya han recorrido el camino que ahora ellos intentan empezar, pero que no se distraigan nunca de su meta trazada, y que sean rígidos con las normas que aprendan y que tengan, pero flexibles en sus expectativas, con objetivos realistas (tanto económicos, como del tiempo necesario) y que no olviden que el premio, la meta, la ansiada consistencia, es demasiado apetecible como para no obligarse a ir a por ella con todo el esfuerzo del mundo.
Pero siempre sin olvidar que sus compañeros de viaje deben ser la disciplina, el esfuerzo, la dedicación, la humildad, la paciencia, la constancia, la perseverancia,...y que como decía el final uno de mis poemas de cabecera, “tarde ó temprano, aquél que gana es aquel que cree que puede hacerlo”.
------------------------------------------------------------------------------------------------------
FUENTE: TRADERS´ MAGAZINE
0 comentarios:
Publicar un comentario